Yo siempre fui el hijo pequeño en mi casa, mi hermano me sacaba 3 años e imagino que perdió su trono como les pasa a tantos y tantas niños y niñas. Ahora que lo veo en mi casa, con mi hijo y mi hija, me doy cuenta de que les hacemos crecer más rápido de lo que deberían, inconscientemente claro, pero al fin y al cabo pasa.
Me doy cuenta de que mi Pequeño Cavernícola tiene que crecer y apañarse él solo en muchas tareas mientras yo atiendo a su pequeña hermana. Tareas que antes aunque supiera hacerlas me gustaba acompañarle y estar a su lado. Ahora le toca apañárselas, aprender, frustrarse, pedir ayuda o tirar de orgullo y hacerlo, aunque sea mal.
No siempre sale bien, crecer anticipadamente no es plato de buen gusto. A mi me gustaría seguir siendo niño, claro, y en lo que puedo así lo soy.
En muchos momentos siento que traiciono a mi peque y cuando más han ido pasando los meses más lo siento, el sabor cada vez es más agridulce: "¿cómo puedo dejarle de lado con todo lo que hemos pasado, con todo lo que me ha hecho sentir y vivir?". "Pobrecito, que estoy sólo con los dos y apenas puedo prestarle atención". Así, noche tras noche, cuando el peque se queda dormido solo en el sofá de puro cansancio mientras doy de cenar o acuesto a su hermana.
Y no voy a mentir, alguna lagrimilla ha recorrido mis mejillas.
Por otra parte, perder el trono, es algo imposible, ya que no le puedo querer más. Sí, esos sentimientos tienen razón porque con mi Pequeño Cavernícola he vivido momentos que siempre serán únicos, todas mis primeras veces en la paternidad han sido con él y eso nunca quedará en el olvido. Todo fue muy diferente con él, quizá por eso el sentimiento de culpa se agrava más.
Al final ellos siempre nos demuestran que están por encima y no se quedan con lo malo, lo borran, aprecian lo bueno, los momentos divertidos y agradables, los momentos juntos aunque sean tristes. Espero que así sea y que más temprano que tarde él deje de pagar y pueda prestarle y dedicarle más tiempo.
Apañarse con dos estando solo no es fácil pero la peor parte es esta, hacerle crecer apresuradamente.