miércoles, 24 de febrero de 2016

El segundo.


 No se ni como empezar esta entrada y es que solo pensar en tener un segundo hijo ya hace temblar todo mi mundo de nuevo. Por un lado los sentimientos encontrados, volver a vivir la experiencia vivida hasta ahora por otro lado pensar si podremos afrontar tremendo gasto entre otras cosas. Y es que cuando pensamos en tener otro hijo la balanza queda muy equilibrada pero a día de hoy hay un factor determinante que nos frena en la toma de dicha decisión y no es otro que el factor económico.

 Desde que un día decidí que en un futuro muy lejano sería papá, siendo yo todo un chaval y luego más tarde estando ya con la Mamá Moderna sabíamos que a ambos nos gustaría tener más de un hijo, vamos en concreto y exactamente a ambos nos gustaría tener dos. De momento tenemos el 50% conseguido. Desde que tuvimos al Pequeño Cavernícola con nosotros el tiempo ha ido pasando y a lo largo de estos 19 meses (casi) hemos ido planteándolo en diversos momentos.

 Recuerdo en algún momento de esos malos como le decía "Hijo, como sigas así te vas a quedar sin un hermanito" pero más que nada era por hacer un poquito la gracia y levantar el ánimo. Es cierto que no hemos tenido muchas complicaciones salvo con la comida y el peso, lo demás ha ido rodado y digamos que ha sido hasta "fácil" (también la mente puede pasar estas jugadas y borrar todos esos momentos malos para que caigas de nuevo en la trampa). De vez en cuando me acojonan diciendo que el segundo siempre es mucho peor, que será todo lo contrario a éste, pero bueno si me has leído un poquito ya sabrás que hago poco caso a los estudios que sean ajenos a los de mi casa. Por otra parte vemos que se acerca el momento del ahora o nunca porque ambos teníamos claro que la diferencia de edad fuera como mucho 4 años, y para mí ya es mucho, mi ideal son 3 añitos.

 Los aspectos positivos no hace falta ni nombrarlos porque este blog es solo una pequeñita muestra de lo maravillosa que es la paternidad y la familia, para muestra un botón. Pero como he dicho la balanza está equilibrada y es por ello que voy a poner la parte negativa.

 Aspectos negativos a tener en cuenta.


  • La famosa teoría del segundo. Más allá de que yo la crea o no, es cierto que nos hacemos ciertas preguntas porque hemos dormido lo suficiente y del tirón casi todas las noches (excepto claro está los primeros meses) y no hemos escuchado apenas llantos salvo porque estuviera malito o con cólicos. Si ha habido algún momento de tensión con los pocos momentos de éstos que hemos vivido si fueran muchos o más intensos ¿de qué manera nos afectaría?
  • Volver a empezar. Sinceramente a mi me da canguelo volver a empezar, a día de hoy me das un recién nacido de nuevo y me da miedo cogerlo y acercarme a él. Sé que esto como la vez anterior te sale de dentro, es puro instinto, pero volver a pasar por ello ahora que lo hemos dejado atrás da que pensar.
  • La salud. La Mamá Moderna sufrió bastante y acabó renqueante, aún a día de hoy no se ha terminado de recuperar del todo y volver a tener otro implicaría jugar con su salud. Se comenta que tras haber tenido el primero por cesárea el segundo también será del mismo modo, no se cuan cierta es dicha afirmación pero si fuera así, al menos que fuera programada y no de urgencia. Lo que tenemos claro es que iremos a otro hospital.
  • Logística. La casa se queda pequeña, durante los primeros años no habría mucho problema pero según fueran creciendo y necesitando su espacio e independencia habría que ir cambiando de aires ya que mi casa tiene un par de dormitorios y un diseño un tanto regulero. 
 Pero todos estos aspectos no nos los que nos quitan el sueño, podemos y estamos dispuestos a afrontarlos, porque si sol fuera esto la balanza estaría muy desequilibrada a favor del segundo. Así que vamos con...

 El principal factor negativo a tener en cuenta.

 Y no es otro que el dinero, el cash, la guita, los euros contantes y sonantes. Un niño conlleva un gasto importante y con ello muchos ajustes de cuentas (en el sentido literal, no el de cargarse a gente...) y muchas cosas necesarias que hay que adquirir o con fortuna heredar. A día de hoy vamos bastante justos de dinero, llegamos a fin de mes haciendo malabarismos y de momento sobrevivimos de vez en cuando vendiendo cosillas que no usamos u otras que sí usábamos pero podíamos prescindir dado el caso (como uno de los coches).

 Sin duda con dos niños el gasto aumenta, aunque hay cosas que nos quitamos el gasto por tener ya de antes como la ropa, el mobiliario, un carro, la mochila de porteo y alguna cosa más, hay otras que tendríamos que volver a comprar o pedir, como por ejemplo otra silla para el coche, que no es moco de pavo, o nuevo mobiliario para complementar el actual. Luego evidentemente la alimentación y la higiene, en la higiene bueno, lo mismo vale un champú para uno que para dos, se gastará antes y punto, pero con el tema de la alimentación ahí si que se puede notar si tuviéramos que volver a dar leche de fórmula por poner un ejemplo, o el volver a comprar pañales (supongo que cuando llegara el momento el Pequeño Cavernícola ya no los usará).

 Y ya no entremos en temas de guarderías, educación, vacunas... Porque nos pilla lejos y vete a saber como están las cosas para cuando llegue el momento.

 Conclusión.

 Como conclusión seguimos dándole vueltas, con ganas y a la vez con la duda y de momento con la seguridad de que a día de hoy no podríamos mantenerlo o tendríamos que cambiar muchas cosas, eso o que nos toque un Euromillón y nos pongamos a procrear como los Ruiz-Mateos.

 Dentro de unos meses la respuesta...

Imagen sacada de elblogdelenguayliteraturagalileo.blogspot.com

11 comentarios:

  1. Jajaja, tengo una entrada muy parecida por publicar, por un momento he pensado llamar a mi chico por si te está haciendo colaboraciones 😂 en nuestro caso la idea está ahí, rondando, con muchas ganas pero muchas dudas también, hace unos meses publiqué una entrada de cuánto cuesta tener un segundo hijo y aún no me he recuperado del susto. Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, la de hace un par de meses la leí y dejé un comentario, le eché un vistazo de nuevo antes de escribir esta entrada para recordar y no copiar.
      Por cierto nada que ver con tu chico, lo juro por el fuego que calienta mi caverna ;)

      Eliminar
    2. Si lo juras por el fuego será verdad, jaja
      Ánimo y dadnos la sorpresa en unos meses!

      Eliminar
  2. Totalmente de acuerdo, el factor económico es el que de momento solo me hace plantearme tener un solo hijo.

    Por los otros temas ... Yo siempre he oído que con el segundo todo es mas fácil, por la experiencia y demás.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi es que me comentan los que tienen dos, que suele salir totalmente opuesto, siguiendo esa teoría comería bien pero no dormiríamos nada... Bueno, no obstante no son factores determinantes.

      Eliminar
  3. Estás de la pelota... Nuestra experiencia ha sido la contraria: llevamos sin dormir desde que nació y sin perspectivas de mejorar... Por lo que nosotros nos plantamos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que así es difícil elegir, si a nosotros cuando hay fases malas nos hace pensárnoslo no me lo imagino si fuera todos los días/noches...

      Eliminar
  4. Pues yo te quiero animar, nosotros no estábamos muy boyantes pero aún así queríamos un hermanito. Nació cuando el mayor tenía 2 años y 9 meses. El gasto no fue tanto como pensábamos, lo teníamos todo y como fueron dos chicos se ha aprovechado al máximo (y se sigue aprovechando) lo único pañales y vacunas como dices, pero asumible. Ahora de más mayores el gasto aumenta pero los sacrificios valen la pena cuando los ves juntos, jugando, peleando, riendo y volviendo a pelear... Ya nos irás informando! Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, estoy de acuerdo y lo confirmo por mi experiencia con mi hermano, sin duda hemos pasado muchos momentos juntos inolvidables, lo único es que a veces lo veo muy negro cuando no llegamos a fin de mes y alguna vez hemos tenido que recurrir a un anticipo de dinero para conseguirlo. No obstante como dices, muchas cosas ya las tenemos a corto plazo.
      Un saludo, gracias por comentar!

      Eliminar
  5. Muy buen post, como todos los que escribes.
    Sinceramente, no creo en esas teorías de que el segundo dará más guerra que el primero, o será más bueno, o comerá peor... Yo soy de las que hasta que no lo veo, no lo creo.
    Y estoy en las mismas que tú cuando Papi y yo nos planteamos darle un hermanito al Peque 82 años y 4 meses). Evidentemente el factor dinero es el primero que se mira porque, por suerte o por desgracia, pocas cosas en la vida son gratis, y que yo sepa los pañales, ropa, biberones, etc no lo son. Uno de los factores que me echa para atrás es volver otra vez a empezar (pecho/biberón varias veces por la noche, tener un bebé en casa, no saber entenderle, los tan temidos cólicos...) sinceramente me da muuuucha pereza volver a eso. Pero sí es cierto que me gustaría que el Peque tuviera un hermanito, ¿cuando? no lo sé, pero como sigamos esperando la pereza va a ir en aumento.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estamos ahora mismo en los 2 años y 1 mes y es como dices, la pereza va en aumento, cada vez que pienso volver a pasar todo, con sus momentos bonitos sí pero también con los duros es uffff estresante. El otro día estuvimos hablándolo y a vueltas con las cuentas y no lo vemos claro aún, las ganas están ahí eso sí, por mi parte más que por parte de la Mamá Moderna.
      Gracias por tus comentarios y apoyo.

      Eliminar

Theme designed by Feeric Studios. Copyright © 2013. Powered by Blogger
Ir Arriba